15 de febrero de 2005 Queridos hijos de Medjugorje, ¡Alabados sean Jesús y María!

Medjugorje está bajo la nieve desde hace un mes, los antiguos nunca habían visto esto, y continúa nevando mientras escribo! Apropiado para el tiempo de Cuaresma donde rezamos en el salmo 50 “¡Lávame, quedaré más blanco que la nieve!”

1- El 15 de enero mi abuelita materna retornó al Señor. Pese a su edad avanzada – 103 años – su espíritu permaneció despierto hasta el final y siempre tenía una palabra de agradecimiento o de cariño hacia quienes la asistían. Quisiera aprovechar para contarles un episodio de su vida espiritual que me parece alentador, especialmente para quienes tienen miedo de envejecer. ¡Tenía entonces tan sólo 101 años!

Un día en que pasaba por París entre dos misiones, mantuve con ella una de esas sustanciosas conversaciones que son inolvidables. Me abrió su corazón y me confió una preocupación mayor: “Mira, querida mía, tengo una pena. ¡Una gran pena! Me falta algo con Dios y esto me tiene intranquila. Cuando los veo a ustedes, a todos ustedes, a tu mamá y a tus hermanos, a todos los “pequeños Maillard” (sic), es evidente que les gusta rezar. Experimentan la alegría de rezar, aún largamente. Pero yo, en cambio, no tengo eso, ¡nunca lo he tenido! Sí, por cierto, rezo mis oraciones todos los días, mi rosario y todo eso, y aún “un pequeño pensamiento antes de acostarme”, pero a decir verdad, cuando termino con mis oraciones, ¡me alegro! Y bien, desde hace un tiempo, que me digo que esto no es normal. ¡Dios es tan bueno, tan grande, yo debería estar contenta de rezarle!”

Personalmente, no estaba muy preocupada por mi abuelita porque ella siempre ha tenido un corazón maravilloso, siempre dispuesta a escuchar, consolar y animar. Estaba muy cerca de Dios aún sin que ella lo supiese. Le dije:
– Mamy*, lo importante en la vida, es amar, y usted ama! ¡No se inquiete! De todas formas, voy a orar por usted en Medjugorje y le vamos a pedir juntas a Dios que le haga experimentar esa alegría en la oración como usted la desea, muy sencillamente! La Santísima Virgen en Medjugorje nos invita a “orar hasta que la oración se transforme en alegría”. Si ella lo pide, ¡es porque la gracia es ofrecida! Con Dios, hay que pedir como si fueramos niños, con una confianza total, ¡es lo que funciona mejor!
– Bueno, mi querida, de acuerdo. Tú rezas desde allí y yo intento hacer lo mismo aquí, y permaneceremos bien unidas!
Seis meses más tarde, vuelvo a verla y de inmediato me anuncia:
– ¿Recuerdas nuestra última conversación? Bueno, querida, ¡ya está!! ¡Ahora rezo en la alegría! – Y luego hizo un gesto de niño completamente confundido ante el descubrimiento de un regalo inmenso, espléndido, que superaba todo lo que podía soñar – . Ahora comprendo por qué el Señor hizo que me quedase tanto tiempo en la tierra. ¡¿Te das cuenta?! Fue necesario vivir hasta los 102 años para poder recibir esta gracia! ¡Y bien, no lo lamento, valía verdaderamente la pena esperar tanto tiempo!

Poco después fue transferida a mi Comunidad** donde vivió todavía 18 meses más. A todos les gustaba pasar un tiempo en su compañía. Junto con la oración del corazón, Dios le había regalado también el humor! No tenía absolutamente más miedo a morir. “Voy a ir a arrojarme en los brazos de Dios”, le decía a mi hermano. Se apagó con una sonrisa, colmada de paz.
Qué hermosa obra realiza Dios en aquellos que nuestra sociedad “performante” juzga demasiado rápidamente como “inútiles”! En realidad, estos “inútiles” son muy “provechosos” pues su belleza secreta será un atavío eterno para toda la Iglesia del Cielo, mientras que este mundo junto con sus riquezas pasajeras nos abandonará…

2 – Podemos imaginar la fiesta que hubo en el Cielo el 13 de febrero pasado para los bienaventurados Francisco y Jacinta de Fátima que pudieron finalmente darle la bienvenida a su querida prima, Lucía Martos, la pastorcita que vio a la Santísima Virgen con ellos en Cova de Iria, en 1917 y se apagó en su Carmelo de Coimbra en Portugal, a la edad de 97 años. (¡Notemos que ha sido un 13, al igual que las 6 apariciones!).

La prensa religiosa abunda en publicaciones sobre las apariciones de Nuestra Señora del Rosario a los tres pastorcitos de Fátima desde el 13 de mayo al 13 de octubre de 1917. No puedo evitar sonreirme pensando que nuestra santa del año (para Children of Medjugojre) ¡es precisamente Nuestra Señora de Fátima! Tenemos aquí una ocasión providencial para vivir y volver a lanzar el llamado de María al mundo. Esta intervención divina en Portugal, en medio de la primer guerra mundial, constituye uno de los acontecimientos más importantes del siglo XX; por otra parte, es una profecía que continúa vigente y que se realiza también por medio de Medjugorje “Al final, mi Corazón Inmaculado triunfará!“ Ahora bien, el medio para apresurar este triunfo es nuestra consagración al Corazón Inmaculado de María.

“La Señora” había dicho que pronto se llevaría al Cielo a Francisco y a Jacinta, pero que Lucía permanecería aún en la tierra, porque, según le dijo a Lucía, “Jesús quiere servirse de ti para hacerme conocer y amar. El quiere establecer en el mundo la devoción a mi Corazón Inmaculado”. Ahora que Lucía se ha ido con el Señor, ¿quién va a continuar esta bella misión sobre la tierra? ¡Nosotros!! La Gospa nos dijo tantas veces en Medjugorje: “Tengo necesidad de ustedes, sin ustedes no puedo ayudar al mundo”.

Como todo lo que el Cielo les propone a los niños, la Consagración es algo muy sencillo y muy profundo. Así como María, luego de pronunciar su “SI” al Angel, fue tomada por el Espíritu Santo y concibió a Jesús en su seno, de igual manera el SI radical de los tres pastorcitos a María y al plan de Dios sobre sus vidas, le permitió al Fuego del Espíritu Santo tomarlos y fueron llenados de Jesús. No tenían más miedo a nada y estaban dispuestos a todo! Lucía cuenta que luego de haber recibido sus tres SI, “la Señora sonrió, abrió sus brazos y de sus manos partieron rayos de Luz que nos tocaron y penetraron”. “Esta luz, dirá ella luego , era Dios!”

Como fruto de la Consagración de los tres niños de Fátima y más tarde, de su país, la Virgen protegió al Portugal de la segunda guerra mundial y de la herejía, como lo había anunciado “si ustedes hacen lo que yo les pido” ¡Si los demás países hubieran también hecho lo mismo!

En la actualidad no es demasiado tarde, pues María siempre tiene en reserva ese mismo Fuego Divino para nosotros. ¡Basta con que pronunciemos nuestro SI de todo corazón, sin reservas, ni temores! ¡Que nos ofrezcamos a ella en cuerpo y alma, y a Jesús, por medio de ella! Si tres niños pudieron obtener una gracia tan grande para su país, cuánto más podemos obtener ahora para el mundo si los millares de estos “Queridos Hijos” que somos, grandes y pequeños, nos decidimos a dar nuestro SI a la Gospa en nuestras familias, en nuestros grupos de oración, en nuestras parroquias y, – nada es imposible para Dios – … ¡en nuestros gobiernos!! Dejarse formar a la escuela de Medjugorje, es continuar lo que María ha iniciado en Fátima, ser los artesanos del triunfo de su Corazón sobre el mal y la guerra, sobre la perversión y la muerte, sobre la destrucción de nuestro planeta y sobre todo plan de Satanás. ¡He aquí el plan de María! ¿No tenemos por cierto extrema necesidad de él?

Me he enterado que los obispos españoles han decidido consagrar su país al Corazón Inmaculado de María en la basílica del Pilar, en Zaragoza el 21 y 22 de mayo próximos. ¡Gracias Señor! ¡Ojalá muchos otros países sigan su ejemplo!

3 – Para vivir intensamente esta Cuaresma, Vicka nos ha dado algunas palabras muy sencillas que nos centran sobre lo esencial. “La Gospa está contenta cuando nos ve vivir la Cuaresma con el corazón, y no de manera forzada. Podemos decidir nuestros sacrificios según nos lo muestre el corazón, y de esta forma los ofreceremos con alegría. Es importante orar más, sobre todo ante la cruz. Cada día, es bueno recitar los misterios dolorosos ante la cruz, de rodillas (si nuestra salud nos lo permite), contemplando la cruz y experimentando hasta qué punto Jesús sufrió por nosotros. ¡Todos podemos rezar el rosario***! Si esto nos resultase dificil, pidamos la gracia de poder hacerlo y luego pongamos toda nuestra buena voluntad.
El mejor sacrificio es cambiar en el interior de nosotros mismos, cambiar de vida mirando a Jesús. Preguntarle: ¿Jesús, en qué puedo ayudarte? ¿Cómo puedo caminar contigo? Menos palabras y más apertura al cambio!”

Durante esta Cuaresma, preparémonos a ser colmados de la alegría y de la luz pascual. Hoy me edifico interiormente caminando con Jesús, y en el día de Pascua Jesús resucitará en mi corazón!”

Querida Gospa, ¿quién mejor que tú
puede tomarnos tal cual somos para unirnos a Jesús?

Notas de traducción
* “Mamy, Papy” son apelativos cariñosos de abuela/o en francés, que equivaldrían a nuestros “abu” o “abuelita/o”.
** Pasó sus últimos meses en una de las casas de la Comunidad de las Bienaventuranzas en Francia, donde vive el hermano de Sor Emmanuel, Vincent, que también pertenece, junto con su esposa a la Comunidad.
*** Se refiere al rosario completo, ya que cuando se habla de la tercera (o ahora cuarta) parte del rosario, para lo que nosotros comunmente denominamos “rosario”, se utiliza la palabra “chapelet” y no “rosaire”.

PS1 – La Virgen nos ha dado un medio eficaz – el ayuno – que “hasta puede suspender las leyes naturales”. El librito “Liberarse y sanarse por medio del ayuno” nos hace descubrir esta arma que nos permite prevenir el drama, socorrer al hombre en peligro y obtener muchos frutos más:
Liberarse y sanarse por medio del ayuno – Sor Emmanuel
Children of Medjugorje de Argentina
Pesos argentinos 8
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