15 de julio de 2005 Queridos hijos de Medjugorje, ¡Alabados sean Jesús y María!

1 – Al igual que en muchos otros santuarios, ¡Medjugorje es un lugar de sorpresas! El mes pasado, me encontraba “de casualidad” en Bijakovici por una urgencia y se presenta un hombre … Benjamín Berger, un antiguo amigo mío, judío mesiánico, del tiempo en que vivía en Jerusalén. Solíamos (la Cdad. de las Bienaventuranzas) pasar horas rezando con él y con su hermano Rubén. Hablábamos de Dios y ellos nos explicaban la Biblia a partir del hebreo. Cuántas veces hicimos juntos la experiencia de los peregrinos de Emaús, quienes, luego de la partida de Jesús, comentaban entre ellos: “¿No ardían acaso nuestros corazones cuando nos explicaba las Escrituras?

Benjamín aceptó compartir su maravilloso testimonio, y aquí les cuento algo del mismo:
Testimonio de Benjamín Berger, Medjugorje, junio 2005
”Provengo de un ambiente judío religioso, no ultra ortodoxo, pero sí ortodoxo. Mis padres, mi padre de origen alemán y mi madre austríaca, ambos supervivientes de los campos de concentración nazis, habían logrado emigrar a los Estados Unidos. Una gran parte de mi familia fue exterminada en Auswitch. Tanto mi hermano Rubén como yo, sus únicos hijos, fuimos por tanto educados como judíos ortodoxos. Durante la primera parte de mi vida, fui muy religioso, pero a medida que pasaban los años, comenzaron a surgir muchas dudas en mi corazón, particularmente con respecto a la historia del pueblo judío y lo que le había acaecido. Me preguntaba cómo Dios había podido permitir algo tan terrible. Luego, siendo estudiante universitario, decidí que debía abandonarlo todo y volverme… no diría exactamente ateo, pero casi ateo. Pensaba: “No puedo creer que Dios exista verdaderamente y que haya permitido algo así”, y por otra parte nunca había hecho verdaderamente la experiencia de Dios. Entonces decidí tirar todo por la borda y me volví completamente secular.

Al cabo de cierto tiempo, vine a Europa por motivos de trabajo, primero a Dinamarca donde trabajé en un estudio de arquitectura. Pero en el fondo de mí, experimentaba un gran vacío. Me faltaba algo y nada podía colmar ese vacío. Me interesaba mucho al arte y a la arquitectura, esto me apasionaba, pero no era suficiente. Entonces llegué a resignarme, diciéndome en mi fuero íntimo: “¡No sé si alguna vez encontraré la respuesta a lo que busco!” No sabía lo que buscaba, pero sabía que tenía que ver con la verdad. Permanecí así durante largo tiempo.

En 1967, un día de primavera creo, volví a casa luego de mi trabajo. Era un día como cualquier otro. Estaba sentado leyendo el diario como solía hacerlo al volver del trabajo. Y nuevamente me puse a pensar en muchas cosas. Pensé en la fe y me dije: “Y bien, he llegado a un punto en mi vida en que no creo en nada. ¡Esto no es normal, tengo que creer en algo! Aquello me inquietaba mucho y pensé: “Si debo creer en algo, ¡quiero creer en algo que sea verdadero! ¡Porque uno puede creer en cualquier clase de cosas!, pero no sabía qué podía serlo.
Estando ocupado en esas cavilaciones, de repente sentí que había alguien más en la habitación. Sin embargo, no veía a nadie. Y esto me causó cierto temor, porque nunca había tenido esa clase de experiencias, ni había participado en ningún tipo de culto de ninguna especie. Era una persona muy racional, algo en cierta manera típicamente judío. Lo que podía ver y tocar, ¡eso era lo que podía creer! No creía en lo que no podía ver.
No obstante había una presencia en la habitación, y esa presencia se hacía cada vez más intensa. Tenía mucho miedo, aunque se trataba de una presencia de una pureza nunca antes experimentada. ¡Había algo tan puro que emanaba de aquella presencia! ¡Era absolutamente inmaculada! (No era una cosa, era una persona, pero al principio yo decía “una cosa” porque no podía de manera alguna identificar lo que era). ‘Esto’ llenaba la habitación. Experimentaba como una sensación de la Santidad de Dios en el cuarto. Por supuesto, para alguien que no estaba en absoluto acostumbrado a pensar en esos términos, no sabía de qué se trataba. Luego, fue como si alguien viniera muy cerca de mí, con una llave en la mano, luego introdujo esa llave en mi corazón, la hizo girar y la puerta se abrió. Era una puerta extremadamente maciza, semejante a la puerta de un banco, de aquellas donde se guarda el dinero, como la puerta de una caja de seguridad. ¡A eso se asemejaba la puerta de mi corazón! Cuando la puerta se abrió, y fue como si ese amor hubiera entrado e inundaba totalmente mi corazón. No comprendía qué era lo que estaba ocurriendo pero comencé a llorar. Y permanecí allí, sentado, llorando por un buen rato. Fue entonces cuando Dios me habló, y cuando lo hizo, era como si Su voz llenase el universo entero. Me dijo: Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob y soy Tu Dios. Tu vida es como un libro abierto ante mí. Conozco todo de ti”.
Era muy reconfortante, en cierta manera, saber que Dios existía y que me hablaba, pero también era aterrador. Era maravilloso saber que Dios era un Dios personal, que acudía a mí de esa forma. ¿Pero, por qué me estaba ocurriendo eso precisamente a mí? ¡No tenía la menor idea! Estaba en la búsqueda de la verdad, pero vivía mi vida a mi manera.
Fue entonces que me aconteció algo más increíble aún. Desde lo alto del Cielo cayó un nombre hebreo, Yeshua, el nombre de Jesús en hebreo. No había leído nunca el Nuevo Testamento, no tenía ningún amigo cristiano y nunca había verdaderamente oído hablar de los Evangelios. Lo único que sabía sobre Jesús, lo había oído decir aquí y en la tele, en el momento de Navidad, o en films como “La Túnica” (de Henry Koster, con Richard Burton, 1953, NDT), sin haberlo nunca comprendido verdaderamente. Los cristianos siempre me habían desconcertado porque hablaban de Sión, de cosas que, siendo judío, me eran familiares, pero no llegaba a comprender cuál era el nexo entre ellos y nosotros. Había crecido en un entorno en el cual no teníamos vínculo alguno con Jesús. El estaba allí muy lejos, verdaderamente muy lejos de nosotros. Pero en el preciso momento en que recibí Su nombre, en ese preciso instante, supe que era el Mesías, que él era el Dios de Israel. Era una revelación, por cierto, ya que esto no provenía de mi espíritu. Supe que Él era la respuesta a mi pregunta, a todos mis cuestionamientos. Sabía que en Él iba a encontrar respuesta a todas mis preguntas.

Luego, tuve una experiencia difícil de poner en palabras, pensé: “Si alguien como él viniera al mundo, ¿qué sería de él?” Sabía que el mundo lo rechazaría y lo crucificaría porque era completamente lo opuesto a lo que hay en el mundo. He aquí como esto comenzó…”
(……)
Benjamín me cuenta luego más de veinte años de su vida con Jesús, en especial su encuentro con una comunidad italiana muy relacionada con Medjugorje.
La entrevista prosigue de esta manera:
”Hemos conocido esta comunidad en 1996 y Dios nos ha unido de manera muy profunda en nuestros corazones, estamos profundamente unidos. Fueron un modelo de vida para nosotros y esto nos ha ayudado mucho. Desde entonces hemos permanecido muy próximos, manteniendo contacto, y si Dios quiere, vendrán a Israel en octubre próximo. Veremos qué sale de todo esto. Es por cierto la primera vez que una comunidad mesiánica y una comunidad católica viven una tal comunión, una real comunión. No creo que esto haya ya sucedido anteriormente. Pienso que es un signo, un signo profético de lo que Dios desea (…)

Luego, mi venida a Medjugorje… Siempre me interesé por Medjugorje porque había oído muchos comentarios sobre este lugar. Sabía que muchas personas se convertían aquí a Jesús y esto me conmovía profundamente. El hecho de que tanta gente se encontrase con el Señor, ¡no podía ser obra de Satanás! Y finalmente en ocasión de una conferencia en el sur de Italia, el otro dia, el hermano Luis (quien me acompañó en coche) propuso traerme a Medjugorje. ¡Y es así como vinimos de inmediato!”

(Le pregunté a Benjamín: “En Medjugorje, ¿has recibido algunas luces sobre la Madre de Jesús o ella continúa siendo un interrogante para ti?”)
”Te contestaré que le he formulado al Señor esta pregunta durante largos años. Una de las razones por la cuales lo hacía es en referencia a la unidad de la iglesia. Veía bien que para que la unidad de la iglesia se realice, era preciso hacerla sobre ciertos puntos. Probablemente este sea el punto de mayor desacuerdo con el mundo protestante. No somos protestantes, estamos un poco en el centro de las diferentes posturas de la iglesia. Reconozco que es uno de los puntos más importantes de división pero siempre he permanecido abierto sobre el tema., nunca me dije que no venía de Dios. Simplemente dije: “No lo comprendo plenamente”. Creo que aquí, durante estos últimos días, me acerqué porque escuché los testimonios de los videntes y son muy auténticos. No hay duda alguna al respecto. No hay nada de raro en sus testimonios, son todos muy auténticos. Los mensajes que he recibido son los mensajes fundamentales que deben ser compartidos con el mundo: conversión, oración, una vida de santidad, de pureza, de consagración al Señor. Estoy muy conmovido por lo que he escuchado. También esta mañana, tuve un encuentro con Vicka y ella irradiaba el amor de Dios en su simplicidad extrema. Creo que estas cosas son de Dios, todavía me falta comprender lo que todo esto significa, pero estoy en el buen camino”.

Benjamín tiene la intención de volver a Medjugorje, sin duda con su hermano Rubén. Tengámoslos bien presentes en nuestras oraciones, así como ellos nos tienen en las suyas porque, sí, este signo de acercamiento y de comunión dado por Dios es profético y nos concierne apurar su pleno cumplimiento por medio de nuestras humildes oraciones! Medjugorje podría ser el lugar donde “el hijo mayor” y “el hijo menor” se encuentren de manera privilegiada y se estrechen en un abrazo!

2 –  Una buena noticia: según el diario italiano “Il Messagero” del 1° de junio 05 (www.ilmessagero.caltanet.it), el papa Benedicto 16 ha manifestado gran interés en la imagen de la Virgen de Medjugorje, llevada desde Medjugorje a Civitavecchia en 1995. (Esta estatua ha derramado 13 veces lágrimas de sangre en casa de Gregori en febrero de 1995 ante 10 testigos y una 14° vez en la casa del obispo, frente a numerosos testigos. Los exámenes que se le han realizado han confirmado que se trata de sangre humana, masculina). El papa dijo: “La Virgen de Civitavecchia va a hacer grandes cosas” mientras que saludaba a Mons. Grillo en la Conferencia episcopal italiana, el 30 de mayo. Igualmente, el papa Juan Pablo II veneró esta imagen con gran fervor. En efecto, Mons. Grillo le contó a Benedicto 16 que una tarde de febrero de 1995 trajo la imagen milagrosa al Vaticano y que Juan Pablo II la veneró y oró ante ella. Luego, colocó sobre la cabeza de la Virgen una corona que había traído él mismo en persona. Es muy significativo que ambos papas tanto Juan Pablo II como Benedicto 16 hayan manifestado interés sobre este fenómeno sobrenatural tan relacionado con Medjugorje, pues hay una cantidad bastante importante de detractores. De hecho, hicieron más que mostrar un simple interés, han manifestado su opinión favorable frente a testigos.

Podemos preguntarnos por qué la Virgen ha elegido derramar lágrimas de sangre en “la Puerta de Roma” (nombre que recibe Civitavecchia), porque muy bien habría podido derramarlas en Medjugorje, lugar de proveniencia de la imagen. ¡Esta es una pregunta que cada uno de nosotros podemos formularnos en oración! El acontecimiento puede interpretarse a la luz de un mensaje dado en Medjugorje: “Les suplico, no permitan que derrame lágrimas de sangre por las almas que se pierden en el pecado” (24-3-84)

3 – Medjugorje prepara activamente el Festival de Jóvenes (del 31 de julio al 6 de agosto). Hoy en día muchos jóvenes viven una especie de infierno interior y les es difícil escapar de las trampas mortales en las cuales han caído. Sectas, droga, alcohol, uso “desordenado” de su sexualidad, músicas obsesivas y mal inspiradas, experiencias satánicas, ocultismo, espejismos del New Age, etc… La Gospa tiene un plan para ellos como también lo tiene para quienes marchan hoy en la luz. Pero ese plan no es mágico, necesita de un SI sincero a Jesús, el único Salvador y de un NO rotundo al pecado. En Medjugorje, la Gospa no rebaja con agua el vino el Evangelio, y es por ello que los jóvenes acuden de a miles. Como Madre conoce el increíble potencial de amor que está dormido en el corazón de cada hombre. ¡Todos estamos llamados a la santidad! No es por casualidad que ella ha elegido jóvenes para que anuncien al mundo cuál es la puerta de salida de esos infiernos terrestres y el camino hacia la más alta santidad. Me gustan particularmente estos mensajes que han sido recibidos por Jelena en el grupo de oración:

“Por medio del ayuno y la oración, podrán obtener todo lo que pidan” (25-10-83)
“Veo que todos están muy cansados. Deseo tomarlos a todos en mis brazos para que descansen junto a mí” (28-10-83)
“Aún cuando caigan en las pruebas, ¡no se detengan! (19-3-83)
“Se hacen muchas preguntas y no hacen más que sobrecargarse. El mismo Jesús se ofrece a ustedes y ustedes lo rechazan. En El encontrarán respuesta a todos sus cuestionamientos. ¡Acéptenlo! (7-4-84)
“Lean la vida de santa María Goretti. Oren con ella al Señor para que ella les obtenga sus virtudes” (6-7-84)

Chiara Amirante, la fundadora de “Nuovi Orizzonti”, será una de las disertantes en el Festival. Estoy segura que su alegría tan contagiosa se derramará como un río sobre todos nosotros!

Querida Gospa, ¡sólo tenemos una vida!
¡Ayúdanos a que sea lo más bella posible!

Sor Emmanuel +
© Children of Medjugorje 2005

PS 1  El próximo Report será enviado el 15 de agosto.