15 de agosto de 2005 Queridos hijos de Medjugorje, ¡Alabados sean Jesús y María!

1 – Muchos nos han escrito con respecto al judío mesiánico, Benjamín Berger, a raíz de su testimonio en el Report del 15 de julio pasado. Por este motivo quisiera agregar un esclarecimiento suplementario:
Sobre el pueblo judío por las Sagradas Escrituras sabemos que “si la exclusión de Israel trajo consigo la reconciliación del mundo ¿qué será su reintegración, sino un volver de la muerte a la vida? (Rom. 11,15)
La aparición, bastante reciente, del movimiento mesiánico en el pueblo judío es un maravilloso signo precursor del encuentro del hijo mayor  con el menor en el cuerpo de Cristo. Es por ello que el trayecto de fe de nuestro hermano Benjamín nos produce una gran alegría, ¡revelándonos al mismo tiempo nuestra torpeza espiritual! El Espíritu Santo está actuando y ¡queremos caminar en su mismo sentido! (Ver NB sobre el movimiento mesiánico)

Al igual que nos ocurre a nosotros los católicos, la fundación de la obra de Dios atraviesa purificaciones. He aquí lo que nos cuenta Benjamín:
”… Estuvimos cinco años en Betania. Otro hermano se unió a nosotros, por lo que éramos tres hermanos. Luego fuimos a Galilea. Vivimos allí en un pequeño pueblo, donde fuimos testigos de muchos milagros. Ocurrían hechos extraordinarios en muchos aspectos y muchos encontraron al Señor. Por ejemplo:
Un hombre que no sabía de nosotros veía a Jesús en sueños. Luego, nos conoció y se nos unió. Nuestros vecinos de al lado se convirtieron al Señor. Niños tocados por el Espíritu Santo se convertían. En poco tiempo, formábamos una pequeña comunidad, ¡cuando nunca habíamos previsto transformarnos en una comunidad! Comenzamos por ponerlo todo en común, comíamos juntos, orábamos juntos. Y de esta forma recibimos verdaderamente la revelación de la comunidad. Había comenzado con mi hermano y yo, pero luego creció y comprendimos que estábamos llamados a vivir una vida comunitaria.
Vivimos cinco años en ese pueblo. Hacia el final, fuimos perseguidos. Algunos judíos ortodoxos vinieron y nos atacaron físicamente. Nuestra casa fue completamente dada vuelta. Entraron, rompieron los muebles, derramaron pintura negra por todas partes… paro de contar. Pero este acontecimiento conmocionó al país entero. Ocurrió hacia mediados de los años 70. Nuestro testimonio terminó siendo publicado en muchos periódicos, apareció también en la radio y en la televisión. ¡Era el primer testimonio de creyentes mesiánicos que se transmitía por la televisión en Israel! En aquel momento, el Movimiento Mesiánico comenzaba a desarrollarse en Israel. Es más, nos llegaban noticias que en distintos lugares había Israelitas que abrazaban la fe. Y desde entonces, esta comunidad se ha ido multiplicando. En la actualidad existen alrededor de 100 grupos mesiánicos en Israel y están en expansión.
De allí nos trasladamos a Tiberíades donde también pasamos otros cinco años. Fundamos una asociación de creyentes mesiánicos. También sufrimos muchas persecuciones de parte de los judíos ortodoxos. Quemaron nuestra casa. Una vez, nos arrojaron piedras durante una de nuestras reuniones. Habíamos alquilado un local en un hotel, que tenía ventanales. Nos tiraban piedras. No sabíamos qué hacer, porque estábamos justamente celebrando la Cena del Señor. Entonces nos dijimos: “Ahora que hemos comenzado a orar, ¡no podemos detenernos! Colocamos por tanto a los niños en el centro y formamos un círculo alrededor de ellos. Luego, continuamos orado. ¡Y las piedras volaban! Pero Dios nos ha protegido. Una piedra pasó justo por encima de la cabeza de una hermana, pero no le causó daño alguno. Luego, incendiaron aquel hotel, de manera que no podíamos encontrar un lugar dónde reunirnos ya que nadie quería alquilarnos uno. Entonces comenzamos a reunirnos en uno de los parques los sábados, el día del Shabbat, porque sabíamos que durante el Shabbat no nos atacarían. Y es así que esta comunidad ha sido fundada, en medio de muchas persecuciones…”

2 –  El 2 de agosto pasado, la Virgen vino a rezar por los no-creyentes como lo hace mensualmente con Mirjana. Estábamos en pleno Festival y miles de jóvenes del mundo entero se reunieron para acoger a su Madre, orarle y recibir su bendición. Luego de la aparición, Mirjana nos trasmitió un mensaje que nos ha profundamente conmocionado. En efecto, describe una situación tan real, que no puede callarse ni ser negada. Sería bueno aprenderse el mensaje de memoria y pedirle al Espíritu Santo la gracia de mostrarnos una radiografía de nuestro corazón; que a través de sus rayos divinos nos revele la identidad de lo que contiene nuestro corazón. De esta forma, ¡pasaremos revista a nuestras elecciones! Nos decidiremos a albergar en él el amor verdadero y no el trucho, la luz verdadera y no los falsos centelleos con los que el mundo nos acosa.
He aquí el mensaje recibido por Mirjana:
”Queridos hijos, he venido a ustedes con los brazos abiertos para cobijarlos en mi abrazo, bajo mi manto. No puedo hacerlo mientras su corazón esté lleno de falsos centelleos y de falsos ídolos. Purifiquen su corazón y permitan que mis ángeles canten en él. En ese momento, los tomaré bajo mi manto y les daré a mi Hijo, la verdadera paz y la felicidad. ¡No tarden, hijitos! Les agradezco.  (Ver PS1)

3 –
La vidente del corazón, Jelena Vasilj-Valente y su marido Maximiliano, se encuentran en este momento en Medjugorje de vacaciones (viven cerca de Roma y tienen dos hijos de corta edad). Formada por años directamente por la Virgen por medio de sus mensajes, Jelena sigue siendo una fuente de luz para quienes desean comprender el espíritu maternal de María. He aquí algunas de sus palabras dichas días pasados:
”Antes de casarme, mi vida era más fácil. Estudiaba, estaba libre, de hecho trabajaba en mi formación personal. Ahora, mi vida de esposa y de madre me obliga a poner en práctica lo aprendido, es decir, ¡a darme sin cesar y sin medida! ¡Mis hijos son mis superiores!”

”Observando a mis hijos, aprendo sobre Dios. Dios es relación, y estamos creados a imagen suya. ¡Lo veo en mis hijos! Cuando un niño comienza a meter bulla, grita, llora y patalea, es porque quiere entrar en relación con nosotros. El niño, al igual que Dios, siempre está pidiendo entrar en relación. Para el niño, esto es vital, porque de esta manera se va edificando. La riqueza de la vida nos es comunicada por la relación. Vivimos todos de relaciones con los demás. Cuando un niño experimenta esta relación, no necesita la tele. Se encuentra en paz y satisfecho. Lo he notado con mis hijos. No quieren mirar la televisión y ¡ocurre lo mismo cuando van a casa de sus amiguitos!

”Cuando la tele reemplaza la comunicación, se interrumpe esta relación que precisamente nos une a los miembros de nuestra familia y a nuestros amigos. A menudo construimos muros de protección contra la vida y nos encerramos en un mundo irreal. Cuando estoy con alguien y enciendo la tele, es como si le dijera que no es lo suficientemente interesante para mí y que no merece mi atención. Tenemos la misma actitud para con Dios cuando no lo ponemos en el primer lugar y no oramos. Nos alejamos de la fuente y nos convertimos en seres frustrados. La gracia nos es dada a través de nuestra relación con Dios en la oración.”

Querida Gospa, ¿no puedes abrazarme?
¡Te ruego que intercedas ante tu Hijo para que purifique mi corazón!
¡Que tus ángeles puedan venir a cantar en él!

Sor Emmanuel +
© Children of Medjugorje 2005

PS 1 En el idioma croata no es chocante el utilizar la expresión “falsos ídolos”, aún cuando todo ídolo es ya un falso dios. La Gospa se expresa siempre respetando la cultura del vidente de la escucha. Otro ejemplo de diferencias de culturas: María dice: Yo y mi Hijo Jesús… Esto nos choca, pero es normal para una persona en Herzegovina. Es lindo destacar que el 2 de agosto es también la fiesta de Nuestra Señora de los Angeles, coincidente con la alusión de los ángeles en el mensaje. Esto nos da una luz sobre un magnífico ministerio de los ángeles en el cual pensamos poco: cantan en nuestros corazones cuando estamos en estado de gracia.

NB.: Los judíos mesiánicos son judíos que han experimentado un encuentro personal con Jesús, y que lo reconocen como su Mesías y su Dios. Sin embargo, no podemos llamarlos cristianos, porque han decidido no pertenecer a ninguna iglesia en vistas de salvaguardar su identidad judía.
Los judíos mesiánicos creen que Jesús es verdadero Dios y verdadero hombre; que Dios es Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Su concepción de la Iglesia y de los sacramentos es semejante a la de los protestantes. No reconocen la autoridad del Papa, ni la sucesión apostólica. Sus congregaciones (o comunidades, equivalente a parroquias entre nosotros) son relativamente independientes unas de otras, aún cuando a veces se organicen en asociaciones. El responsable de estas comunidades es ciertas veces denominado “pastor” y otras “rabino”. También existen movimientos internacionales como el de “Judíos por Jesús”, etc. Entre ellos el celibato consagrado es excepcional, como también lo es la vida monástica. Por supuesto dan mucha importancia al plan de Dios para Israel y creen firmemente que el pueblo judío sigue siendo el pueblo elegido de Dios.
Al igual que los protestantes no le rezan a la Virgen ni a los santos y desconfían un poco de las devociones católicas. ¡Sin embargo, hay excepciones!
Su práctica misionera está esencialmente dirigida hacia los demás judíos en Israel, los Estados Unidos, etc…
Se congregan para el servicio de oración el Shabbat y no el domingo. Es un tiempo de alabanza (con cantos en hebreo) y de escucha de la Palabra, a menudo con una homilía de uno de los responsables de la comunidad. Celebran también a veces la santa Cena, comparten el pan partido según la orden de Jesús antes de su pasión. No es la Eucaristía de los católicos o de los ortodoxos, no creen que el pan se transforma en el cuerpo de Cristo, ni el vino en su Sangre (también aquí hay excepciones), y no conservan el pan y el vino luego de la celebración. Celebran también la Pascua en la fecha de la Pascua judía (Pessah). Celebran igualmente las otras fiestas judías. Algunos conservan las prácticas de la Ley moisaica (kasherout, circuncisión, reposo sabático…) y otros no.

Los judíos mesiánicos son un ejemplo para nosotros en lo que respecta su compromiso escatológico, pues esperan fervientemente el regreso de Jesús. Nos recuerdan que los dones de Dios son irrevocables: Dios ama a Israel, el pueblo que Él ha escogido en primer lugar, y esto por toda la eternidad. Su existencia es para nosotros una doble invitación: a retornar a nuestras raíces, a los orígenes de la Iglesia y a mirar con amor hacia el fin, hacia la parusía.

El próximo report será enviado el 15 de setiembre.