Mensaje del 25 de Marzo de 2006

“¡Queridos hijos! ¡Animo hijitos! He decidido conducirlos por el camino de la santidad. Renuncien al pecado y emprendan el camino de la salvación, camino que mi Hijo ha elegido. A través de cada una de vuestras tribulaciones y padecimientos, Dios les mostrará el camino de la alegría. Por eso, hijitos, oren. Estamos cerca de ustedes con nuestro amor. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!”

Comentario